Panamá, 23 ene (EFE).- Miles de personas acuden este miércoles desde tempranas horas de la mañana a las céntricas avenidas de la ciudad de Panamá que recorrerá más tarde el papa Francisco, para guardar un lugar y así poder ver de cerca al santo padre, que participará en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
En familia, en parejas, solos, con sus hijos, nietos u otros familiares, con o sin distintivos de la JMJ, las personas comenzaron a abarrotar las avenidas donde están instaladas las vallas que los separarán del sumo pontífice.
A los fieles, muchos de ellos con camisetas y gorras, no les importó el horario y tampoco el ardiente sol que se avecinaba, y ya desde las 05.00 hora local (10.00 GMT) comenzaron a llegar para ver desde cerca a Francisco.
Esta visita modificó la rutina de los panameños debido a las restricciones a la circulación de vehículos particulares, el cierre de avenidas y el cambio en los horarios de atención de entidades públicas y privadas.
En una esquina de la Iglesia del Carmen, en pleno centro bancario aguardaba sentada la peregrina guatemalteca Alicia Vázquez, que con sus botellas de agua y un poco de comida le era suficiente para aguantar la jornada hasta el paso del religioso.
Mientras se protegía con la sombra de un pequeño árbol, dijo a Acan-Efe que apartó su lugar desde temprano para ver al argentino Jorge Mario Bergoglio, y sostuvo que tratará de saludarlo desde las gradas junto a sus amigas.