NUEVA YORK – El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, habla duramente de los llamados “pulsadores del gatillo” que aterrorizan a esta ciudad.
“Hay un desprecio total por parte de un pequeño número de neoyorquinos violentos que creen que pueden portar armas y usarlas a voluntad”, dijo Adams a FOX 5 NY. “Vamos a ir a 30 recintos donde ahora se encuentra el 80% de la violencia armada y tomar medidas enérgicas contra los tiradores de gatillo”.
Adams ha anunciado que se asociará con la gobernadora Kathy Hochul, quien acaba de anunciar un nuevo grupo de trabajo interestatal sobre armas ilegales.
“Este es el amanecer de un nuevo día”, dijo la gobernadora Hochul el miércoles. “Estamos abordando este problema con todos los recursos que podemos desplegar. El capital humano, las relaciones, las asociaciones para detener el flagelo de las armas ilegales que ingresan a nuestro estado”, agregó.
La ciudad de Nueva York se ha visto afectada por un desmesurado aumento de actos violentos que ha exacerbado los ánimos en su población ante una ola de crímenes violentos con armas de fuego y blancas que han dejado una larga estela de víctimas que van desde una bebé de 11 meses, un paciente en la sala de emergencias de un hospital hasta la trágicas muertes de Jason Rivera y Wilbert Mora, dos oficiales de policía que fueron emboscados mientras acudían al llamado de una emergencia por riña familiar.
Diversas instituciones, ciudadanos comunes atribuyen el aumento de la violencia con armas de fuego en la ciudad de Nueva York a la benevolencia del sistema de justicia criminal, cuyas leyes se han flexibilizado en la última década empujada mayormente pro cabildeos de sectores políticos liberales, que han facilitado un denominador común: “porte indiscriminado de armas ilegales”.
“Muchas de las armas ilegales que terminan en las calles de la ciudad de Nueva York llegan por el llamado oleoducto de hierro. Tengo crimen real y violencia real en mi comunidad, y necesito adelantarme y eso es lo que estoy haciendo al detener a los traficantes de armas como lo estamos haciendo en este caso hoy. Las armas compradas en los estados del sur, donde las leyes sobre armas son más indulgentes, se transportan al norte para venderlas aquí”, dijo el fiscal de distrito del Bronx, Darcel Clark.
“El miércoles, un estudiante universitario de la ciudad de Nueva York fue acusado de vender 73 armas de fuego de Tennessee, incluidas 59 armas cargadas, a un oficial de policía encubierto en el Bronx y Manhattan. El joven de 23 años llevaba las armas en una bolsa de lona mientras viajaba en autobús a la ciudad de Nueva York. Traficaba armas aquí en el Bronx. Era estudiante en Tennessee y, ya sabes, viajaba durante la noche y regresaba a la ciudad de Nueva York, vendiendo armas en el mismo vecindario donde vivía”, concluyó el fiscal Darcel Clark.
