Santiago,RD. “La Iglesia debe ponerse los pantalones y predicar contra la corrupción como un pecado. Los predicadores, mis hermanos y compañeros deben darse cuenta de esto, porque hasta ahora se reduce a la predica del vicio”.
La crítica fue externada por el sacerdote César Hilario, director del Orfeón de Santiago. El religioso dijo que no solamente los vicios son pecados, sino que la corrupción es un mal que afecta a toda la sociedad. Consideró que en las iglesias no se está predicando que el cometer hechos de irregularidades en la administración pública es un pecado.
El sacerdote habló al participar en la caminata organizada por el movimiento cívico Marcha Verde, que proclama el cese de la impunidad y la corrupción. Dijo que el país necesita poner en marcha una lucha constante contra los hechos de corrupción.
Reconoció que la Iglesia Católica ha sido débil en su crítica contra los que cometen irregularidades y se reduce a predicar como pecado el vicio.
