“Hoy anunciamos que se dará una recompensa de un millón de dólares a quién ofrezca información que conduzca a la identificación o localización -en cualquier país- de un líder clave de Al Qaeda: Hamza bin Laden”, anunció el secretario adjunto para Seguridad Diplomática de EE.UU., Michael Evanoff, en una rueda de prensa.
Evanoff aseguró que Osama bin Laden, fallecido en mayo de 2011, pasó años preparando a Hamza para asumir el liderazgo de la organización criminal, que ostenta en la actualidad el egipcio Ayman al Zawahiri, según se puede apreciar en una serie de cartas que fueron halladas en el complejo pakistaní de Abbottabad, donde el padre perdió la vida en una operación de las fuerzas especiales de EE.UU.
A pesar de que se desconoce dónde se encuentra escondido Hamza, Evanoff señaló que todo apunta a que está en algún lugar de la frontera entre Afganistán y Pakistán, posiblemente esperando una oportunidad para cruzar a Irán.
El coordinador de la estrategia antiterrorista del Departamento de Estado, Nathan A. Sales, que también participó en la rueda de prensa, alertó de que no se debe menospreciar la amenaza que aún representa Al Qaeda, pese a que en los últimos años ha estado a la sombra del grupo terrorista Estado Islámico (EI).
“En los últimos tiempos, comprensiblemente, la atención del mundo ha estado centrada en la amenaza de EI, mientras Al Qaeda permanecía relativamente tranquila, pero eso era una pausa estratégica, no una rendición”, advirtió el funcionario estadounidense.