El pasado noviembre, Cuomo prohibió el consumo en el interior de los bares y los restaurantes, después de que la tasa de positividad superara el 5% y tras varios meses en los que estos establecimientos habían podido operar en sus interiores con una capacidad del 25% de la habitual.
Durante todo este tiempo, sí se les ha permitido a los negocios de restauración la apertura de terrazas, una medida considerada insuficiente por estos negocios debido a que las bajas temperaturas de la ciudad no invitan al consumo en el exterior, a pesar de que muchos restaurantes han levantado terrazas techadas y ofrecen calefacción.
El anunció de Cuomo coincide con un día especialmente gélido en la ciudad de los rascacielos, con -6 grados centígrados de temperatura y una sensación térmica de -14 grados.
Asimismo, a partir del 15 de marzo, se permitirá la celebración de bodas en grandes superficies con un máximo de 150 invitados y a un 50% de la capacidad. La única condición es que todos los invitados deben hacerse el análisis de la covid antes del banquete y que sea aprobada por el Departamento de Salud.