Algunos de los policías portaban sus armas de fuego, unos vestían de uniforme y otros taparon sus rostros; la mayoría de ellos a bordo de motocicletas causando un clima de tensión en esa área de la capital.
Al menos dos vehículos fueron incendiados, así como un local de la Oficina Nacional de Identificación (ONI). Se escucharon fuertes detonaciones y numerosos neumáticos ardieron en llamas en varios lugares.
Este movimiento es reivindicado por personas que se identifican como agentes de policía pertenecientes a un grupo llamado «Fantom 509».
Jean Pascal Alexandre es un oficial de la Brigada contra el Tráfico de Drogas (BLTS), de la Policía Nacional de Haití.
Alexandre fue detenido el 8 de mayo pasado por orden de la Fiscalía de Puerto Príncipe bajo acusaciones de asesinato, incendio premeditado, vandalismo, destrucción de bienes públicos y violación de la seguridad del Estado. Actualmente está encarcelado en la Penitenciaría Nacional.
Desde hace una semana, «Fantom 509» ha sembrado el terror en toda la capital durante las manifestaciones que realiza para exigir también la liberación de otros cinco policías responsables de vigilar la casa del presidente del Colegio de Abogados de Haití, Monferrier Dorval, asesinado el 28 de agosto último cerca de la zona residencial del presidente haitiano, Jovenel Moise.
El asesinato de Dorval ha provocado intensas manifestaciones en el país organizadas por juristas, abogados y estudiantes de la Universidad Estatal de Haití.
